El Sacramento de la Penitencia y la Reconciliación

Dios siempre nos dará la bienvenida y perdonará nuestros pecados si realmente nos arrepentimos de ellos.

Reconciliación: significa reparar una relación herida y dejarla como nueva otra vez.
La contrición: es dolor por nuestros pecados y tomar la decisión de no volver a pecar.
La confesión: es la parte del Sacramento de la Penitencia y la Reconciliación cuando le contamos todos nuestros pecados a un sacerdote, quien actúa en lugar de Cristo.
Una penitencia: es un acto que el sacerdote nos da para realizar durante el Sacramento de la Penitencia y la Reconciliación para ayudarnos a reparar nuestra relación con Dios, Su Iglesia y aquellos a quienes hayamos herido por nuestro pecado.
La absolución: es una oración especial que el sacerdote dice en el Sacramento de la Penitencia y la Reconciliación que absuelve o perdona nuestros pecados con la autoridad de Jesús.
La conciencia: es un juicio de la razón por medio del cual reconocemos el bien y el mal. Es la voz de Dios hablando dentro de nosotros que nos guía a hacer el bien y evitar el mal.
Arrepentirse: es lamentarse y pedir perdón.
Una estola: es una tira larga y delgada de tela que un sacerdote usa sobre sus hombros mientras realiza sus deberes sacerdotales.

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